NECESIDADES NO CUBIERTAS EN LA ATENCIÓN SANITARIA: QUÉ SON, CÓMO SE DETECTAN Y POR QUÉ SE ANALIZAN

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Cuando se habla de necesidades no cubiertas en el sector de la salud, debemos distinguir entre las que están relacionadas con el ámbito médico y las que se centran en la atención social: la primera se refiere a las necesidades clínicas y de apoyo funcional; en cambio, la segunda tiene que ver con las necesidades derivadas del tratamiento y que pueden solucionarse a través de los programas de soporte a pacientes.

TÉCNICAS DE DETECCIÓN

La detección de las necesidades no satisfechas de los pacientes se basa en metodologías cuantitativas y cualitativas, que sirven para describir y clasificar las necesidades y las expectativas de los pacientes durante los principales puntos de contacto de su experiencia. El punto de partida es el análisis de los datos existentes, ya que nos permiten llevar a cabo una observación más amplia y exhaustiva, antes de poder analizar nuevos datos de los que todavía no disponemos.

Para poder identificar las áreas de necesidad y, sobre todo, los puntos de contacto que debemos investigar con más detalle, se usan herramientas cualitativas, como la escucha socialentrevistas libres y semiestructuradas o los estudios de campo observacionales, en que los propios investigadores se adentran personalmente en la vida cotidiana de los pacientes. La escucha social, en particular, nos permite monitorear las conversaciones online. Los blogs de asociaciones de pacientes, sus páginas de Facebook y otras plataformas en que los usuarios puedan escribir comentarios son una fuente importante de información que puede ayudar a los profesionales de la salud a describir las necesidades que no siempre se manifiestan en otros estudios.

Las entrevistas libres o semiestructuradas también son una excelente herramienta para identificar las necesidades no satisfechas de los pacientes. Gracias a un enfoque semiformal, permiten determinar aquellos puntos más significativos que habrá que analizar en profundidad.

Una vez concluido el primer estudio sobre las áreas de necesidad, hay que llevar a cabo una investigación cuantitativa, que lo que pretende es validar los resultados obtenidos anteriormente.

De todas las herramientas, la encuesta es una de las más utilizadas. Los cuestionarios incluyen preguntas como la asociación de palabras positivas y negativas con la enfermedad, la identificación de los factores que dificultan el manejo del tratamiento, o la petición explícita de la opinión del paciente sobre los servicios que se le ofrecen.

Pero al final de un proceso tan estructurado, ¿qué datos se obtienen? ¿Cuáles son los objetivos implícitos de estas investigaciones?

NECESIDADES NO CUBIERTAS, EL ROL DEL SISTEMA SANITARIO Y DE LA INDUSTRIA FARMACÉUTICA

Los múltiples objetivos que hay detrás de estas investigaciones pueden analizarse desde la perspectiva de quienes deciden llevarlos a cabo.

¿Por qué el Sistema Nacional de Salud está interesado en detectarlas?

Porque son precisamente las necesidades de los usuarios las que deben orientar las inversiones regionales hacia los servicios sanitarios. Para poder asignar los recursos sanitarios correctamente, es fundamental evaluar si un paciente crónico prefiere un acceso más ágil al centro clínico de referencia o un uso más fluido y accesible de la oferta del médico de cabecera.

¿Y la industria farmacéutica?

A partir de las necesidades no satisfechas de pacientes y médicos, la industria logra definir una estrategia de servicio eficaz que genere valor para los usuarios, y que permita determinar su posición optimizando la creación de servicios de salud públicos y privados.

LA EXPERIENCIA DE HEALTHCARE NETWORK PARTNERS

En este contexto se sitúa la investigación que HNP llevó a cabo en un grupo de pacientes con enfermedades de almacenamiento lisosómico que participaban en un programa de terapia domiciliaria.

En primer lugar, se identificaron las áreas de necesidad a investigar, prestando atención a los puntos de contacto que había que examinar con técnicas cuantitativas.

Para ello, se utilizó la entrevista de visu semiestructurada con enfermeros, que ayudó a conocer las vivencias de los pacientes, teniendo en cuenta la importancia de la narración de la enfermedad a través de un facilitador, que los acompañó en algunos de los momentos más significativos del patient journey.

Además, se realizaron entrevistas libres a los pacientes para obtener una visión más cualitativa, así como un cuestionario para analizar las necesidades identificadas de forma más sistemática.

Los resultados del estudio proporcionaron una escala con las principales necesidades de los pacientes. Esta información se convierte en una base sólida y concreta que permitirá innovar y construir los programas de soporte de acuerdo con sus necesidades.

Realizar un estudio sobre necesidades no satisfechas es una oportunidad para poner en marcha soluciones innovadoras y personalizadas en cada etapa del patient journey.